Esta historia es la continuación de una tradición: Anatolio Ezquer, famoso quesero de Isaba, enseñó a su sobrino José Manuel Marco a elaborar el auténtico queso de Roncal. Siguiendo la tradición familiar y junto a su mujer Gema Hualde, crearon la borda Marengo en 1980.
El 1 de noviembre de 2022 llegamos nosotros, Fernando y Alba a la última quesería del Valle de Roncal que elabora queso con la leche de sus propias ovejas.
Hola, ¿qué tal?
Desde la Quesería Marengo
os saludamos
Alba Rípodas y Fernando Otal,
un ganadero trashumante
y una bióloga ambiental.
Ambos amamos Garde,
la tierra que nos vio crecer
y hemos hecho todo lo posible
por intentar aquí permanecer.
Llevamos muchos años detrás de esta oportunidad.
Por fin ha llegado el momento.
¡Que gran felicidad!
Tenemos muchas ganas,
eso nadie lo puede negar.
Así que cuando queráis,
nos podéis venir a visitar.
Hola, ¿qué tal?
Desde la Quesería Marengo
os saludamos
Alba Rípodas y Fernando Otal,
un ganadero trashumante
y una bióloga ambiental.
Ambos amamos Garde,
la tierra que nos vio crecer
y hemos hecho todo lo posible
por intentar aquí permanecer.
Llevamos muchos años detrás de esta oportunidad.
Por fin ha llegado el momento.
¡Que gran felicidad!
Tenemos muchas ganas,
eso nadie lo puede negar.
Así que cuando queráis,
nos podéis venir a visitar.
La visita a la Borda Marengo fue una experiencia inolvidable. El paseo por los valles de Belagua es simplemente espectacular y conocer el proceso de elaboración del queso de la mano de Alba y Fernando fue muy interesante. La degustación de los quesos fue lo mejor, ¡estaban deliciosos! Gracias pareja!
Ainhoa Osta
La visita guiada en la Quesería Marengo superó todas mis expectativas. Fue muy especial conocer el proceso de elaboración del queso de forma detallada y la degustación de los quesos. Sin duda, volveremos a visitar la Quesería Marengo en el futuro.
Sergio Cruchaga
Es una excelente opción para conocer la cultura y la tradición de los Pirineos navarros. El paseo por los valles de Belagua es muy bonito y pastar a las ovejas te hace sentir una auténtica pastora. La degustación de los quesos es, sin duda, la mejor parte de la visita. ¡Muy recomendable!
Marisa Ricalde
